Fox ahora es la víctima. Para sus ojos, lo que hemos visto es una obra fantasiosa. Así que las casas, la laguna, la alberca, la biblioteca, todo es producto de nuestra imaginación maligna, que no podemos ver alguien que triunfa para atizarle.
Fox, como ningún otro Presidente de los últimos años, tuvo la virtud de caerle bien a todos y tener una imagen fresca y renovada de una investidura tan desolada.
Fox unió a la derecha que no alcanza todavía a darse cuenta que está en el poder y le dio a los jóvenes una opción de entusiasmo.
me consta porque lo viví, cómo la gente se le agolpó en pleno reforma para vitorearlo. Me consta también, su sencillez y sonrisa.
Pero...
La historia acaba como la de muchos otros mandatarios que se hacen ricos a costa del poder.
Sus lujos, cínicamente exhibidos, dan prueba de su fracaso como gestor. Ni mejoró al país, ni resolvió nada.
No cumplió su promesa de cambio.
A diferencia de los otros que ya sabíamos que eran unos ladrones con banda, éste resultó tan cínico, que hasta da verguenza.
Dejó al país inseguro, endeudado y con focos rojos.
Ganó a medias su batalla contra López Obrador y su premio es su ranchito de "300 mil pesos".
No hay que juzgarlo a él como a los demás; él, Fox, nos vendió un país y muchos se lo compraron. Como la Coca Cola, resultó sabroso pero extremadamente peligroso.
El abuso de su consumo, le hizo daño a la nación.
Fox resultó ser un pobre Presidente rico.
Le invito a escuchar la serie de entrevistas que sobre este tema he realizado en MEDIOS UDG NOTICIAS, desde el Epicentro de la Información, por Radio Universidad de Guadalajara en el 104.3 de FM, con el mejor servicio de podcast de México en
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2 comentarios:
Segura estaba de que era un buen hombre y que de verdad amaba a su pais .
Desilución es lo que ahora siento .
Y ahora sale con que su hermano tiene un pisito en Nuevo Vallarta de mas de un millón ?
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