El verdadero peligro para México

Epicentro Informativo de Leonardo Schwebel

A pesar de todo, Calderón continúa con buenos resultados en cuanto a calificaciones. La gente encuestada lo percibe bien y en niveles altos de aceptación.
La pregunta es por qué.
Su gestión ha sido un fracaso en dos rubros fundamentales del desarrollo de un país: seguridad y empleo.
Claro que de todo alguien tiene la culpa y ese alguien no es él. Hasta han tenido que admitir que los seis años de Fox forman parte de esa colección sexenal de errores y omisiones.
Calderón no es mediático ni inteligente ni capaz. Pero tiene a su favor toda una infraestructura de los medios que permite un bombardeo constante de datos que estamos en mejora continua.
La táctica de culpar a los demás ha dado resultado y para el común de la gente el hecho que parezca como el Sherif del pueblo –aunque los indios le llenen de flechas la cabaña- ha resultado positivo para su imagen. Lo mismo que sus mensajes tipo Walter Mercado (nuevamente, perdón Walter).
La guerra contra el crimen organizado es otro rotundo fracaso y recientemente se confirmo que el número de más de 8 mil víctimas durante lo que va de su sexenio, casi duplica el número de bajas de soldados estadounidenses en Irak.
Como la gente se distrae en otras cosas y en ese momento le llega los mensajes propagandísticos de sus logros, llega un momento en que la gente se lo cree.
Como hay pocos espacios para el análisis o contrapesos y éstos a nivel nacional se lo llevan las arengas contra el PRD, entonces como que la imagen se engrandece.
Este es un fenómeno que se llama control de las masas y es propio de los viejos esquemas estatizadores de aquellos países de la ultra más derechista y socialista.
Algo semejante pasaba en la gran época del cine mexicano donde la gran industria nos hizo una imagen que nada tenía que ver con ese México priista.
Distraidos en mil cosas, lo único que vemos de la realidad es la que el gobierno nos hace creer, y lo peor es que nos lo tragamos.
Hoy 2 de marzo de 2009 la economía nacional se vino abajo y Calderón podría presumir de el dólar más caro, el mayor desempleo de los últimos años, déficit y un precio de petroleo bajo; pero eso, como que no cabe en la propaganda fascistoide que nos quiere vender.
La idea es Vivir Mejor y mientras la gente ve ese país que nos venden, compramos ilusiones.
No sé por qué a Calderón le va bien en aceptación, sólo sé que eso, es un peligro para México.