Calderón ocultó epidemia por visita de Obama

Lo anticipamos y se confirma: se sabía de la presencia de un virus extraño semejante a la influenza pero tardío, peligroso y mortal, desde antes.

En Epicentro Informativo radio y después en blogs y videos, dimos cuenta de ello y ahora sabemos por qué el secretario de Salud dijo que era habitual y por qué se les perdieron de analizar al menos 77 muertos (sospechosos de morir por influenza A).

En ese momento no se sabía mucho de su mutación, de su razón por enfermar mexicanos, ni tampoco por qué se triplicaron casos de influenza. Lo que se sabía era que algo raro estaba pasando.

También ya sabemos por qué la OMS primero dijo que México actuó tardíamente y después se empeñó por decir que la cepa mexicana no era mexicana y que se trabajó en orden.

De todo esto hay constancia en la página de Epicentro Informativo y en el Blog de Leonardo Schwebel

Este es el peine:

México ya sabía de un virus extraño y probablemente muy peligroso desde antes y el gobierno encabezado por Felipe Calderón ocultó la información por la visita de Obama.

Newsweek en su próxima edición en español, que sale este viernes 8 de mayo, señala en su portada La negligencia de México, que por la visita de Obama, el gobierno retrasó la alerta internacional de la epidemia. Menciona al menos 12 muertes que pudieron evitarse si Calderón hubiera actuado como debe.

Estamos en presencia no sólo de un error, sino que se puso –ahora sí- en riesgo la salud de los mexicanos.

Hoy los científicos han coincidido que este virus, ya catalogado como H1N1, no es tan peligroso como se pensó, pero que debe seguirse revisando, a fin que no ocasione estragos en lo futuro. Una posible mutación sí sería de grandes dimensiones. De ahí que Calderón nos pusiera como ratas de laboratorio.

En Epicentro Informativo están ya los resultados e imagen de la codificación genética del virus.

Sin embargo, decía, previo a la visita de Obama y en su estadía, ya se sabía de un virus extraño, pero se ocultó al mundo.

Quiero enfatizar esto: según la Secretaría de Salud, hay 77 muertos que no fueron analizados. Si esa cifra la tomamos como base, y tomamos las primeras informaciones que hablaban de al menos 150 y tantos muertos, y si nos basamos en que el virus es curable, como Calderón mismo lo dijo, entonces estamos ante la probabilidad que alguno de esos 77 muertos, al menos, pudo haberse salvado la vida si Calderón no oculta a los mexicanos y al mundo, la alerta de la epidemia para quedar bien con Obama.

Nosotros y muchos más teníamos razón.

El reporte de Newsweek que circula en el mundo señala:

“El 26 de marzo, un mes antes de que se decretara la alerta sanitaria mundial por el virus A H1N1 las autoridades de Salud del país recibieron los primeros informes sobre una epidemia atípica de enfermedades respiratorias, en La Gloria, una pequeña población del estado de Veracruz, pues en plena primavera se habían presentado en tan solo 5 días más de 200 casos de influenza, 24 de ellos alarmantes”.

Newsweek dice: “La gente acudía a los hospitales para saber cuál era su padecimiento”.

Agrega: “…el 11 de abril, la OMS les alertó (a las autoridades mexicanas) sobre una posible epidemia…Pero tal parece que el gobierno mexicano estaba más preocupado por otro asunto: el 16 de abril, el presidente Obama ven dría al país…(Calderón) no quería se cancelara la reunión, si es que se reconocía que había una epidemia en el país…”

Aquí está el peine. Mexicanos muertos porque se retrasó la alerta de una epidemia para que Calderón recibiera bien a Obama.

El resto de la historia, ya lo conocemos.

Calderón es culpable de negligencia. Culpable de mentir. Culpable de acelerar el pánico. Culpable que en mundo nos vean como apestados. Y también, Calderón es culpable de la oficial recesión, que anuncia Hacienda.

Ya es hora que busquemos la cura contra el virus Calderón.