Epicentro de Leonardo Schwebel

Era muy joven cuando viví ese 4-0 contra Trinidad y Tobago en el pre munial de Haití que provocó que nuestra selección no fuera a Alemania 74, justo cuando en 1966 se había tenido una buena actuación, en el 67 se había ganado oro en los Panamericanos y en el 70, por primera vez pasamos a la siguiente ronda. Ya en esa época se hablaba de procesos rotos. A la par de esa desgracia futbolística, del otro lado, un grupo de chavos devolvían la esperanza que coronarían en 1975 con un apagón en el Azteca que alguien salomónicamente resolvió con medalla de oro para Brasil y México. Esa joven selección, que tendría triunfos en el entonces famoso certamen de Toulon, Francia, estaba encabezada por Hugo Sánchez y en ella estaban jugadores que en ese momento eran una semilla pometedora. Para el 76 parte de esa selección y otros elmentos, llegarían a la final del campeonato mundial juvenil, que después quedaría al olvido porque no se consideró oficial por FIFA por asuntos comerciales. Como sea, de aquellos años maravillosos sólo sobresalieron unos cuantos y Hugo entre ellos. Hugo, ya lo sabemos, triunfaría como nadie en España, pero nunca esos campeonatos de goleo fueron significativos para nuestra selección. En en pre mundial del 81 en Honduras falló un gol hecho y el equipo quedó elliminado. En el 86 erró un penal contra Paraguay y se acalambró contra Alemania. En el 90 nada se hizo por los cachirules y ya para el 94, Mejía Barón no se atrevió a ponerlo. Salvo en el 93, en la Copa América, cuando se llegó a la final contra Argentina, Hugo nunca le dio a México más de lo que hizo en sus equipos españoles.
Hoy con este guatemaltazo los chavos sub 23 de la vida cotidiana están viviendo lo que los sub 15 vivimos en el 73. Las historias se repiten ya que siempre se mencionaba de la estructuración del futbol mexicano, de traer nuevas formas y demás tonterías que he atestiguado en mil años. Seamos realistas, no la hacemos en el fut. Punto.