En un país donde el narcotráfico está impune y las pequeñas fracciones guerrilleras con toda tranquilidad explotan nuestros ductos de la empresa matriz de la economía nacional, son sólo ejemplo que la materia de seguridad no se les da.
Mientras Calderón se pasea por el mundo, el EPR baila con el gas que le sirve a otros populares, ¡pero es que hasta para ser pobre hay que saber hacer política!
Un gobierno con seguridad sólo de gabinete, quejas de papel, eficiencia de estadísticas incomprobables, siempre vamos mejor…siempre hay nuevas leyes, estamos bien, lo dice cada comercial de televisión, y el servicio inteligente es tanto, que nadie los ha visto, no se sabe que hacen.
Ahora sólo somos empresarios que desayunan amenaza, gente desplazada por deseos costosos e inútiles de los gobiernos, algún día morirán atragantados por tanta palabra, si no es que el narcotráfico se lleva algunos de sus hijos, porque esa es una crueldad más enorme, ahora ya no hay ricos o pobres, estamos enfermos de la vida, somos adictos o ex adictos: de dinero, o falsa moral, al libertinaje, usar o no usar faldas, la Biblia tibia en casa Jalisco mientras los otros andan de “antro”, descolgados -algunos del tubo-hacen gala de ese nuevo lenguaje de este tiempo: el caca-roteo. Por otro lado guerrillas, el terrorismo que vive en el tercer mundo es aún más patético, no entiendo que tiene de alcurnia un ducto de petróleo, ya se gesta otra palabra, una forma que está hecha para pretender comunicar y sus verbos son la violencia inútil, legisladores sin propuesta, pobres tartajosos en evidencia. No se le puede pedir a la política de México, parece una matriz infértil, a quien pediremos, a quien, ¿al santo de los narcotraficantes?
Ni seguridad, ni empleo, ni educación, ni salud.
¿En qué parte de ese México se está paseando Calderón?
Ahora sabemos que Ugalde se nos va …el rival mas debil…y…adiós.
Ahora ya sabemos que las televisoras y radiodifusores están furiosos con los partidos líderes.
Nuestra oferta es simple. Un IFE que no alcanza la madurez, televisoras y radiodifusoras que lucran con la ignorancia y un gobierno pasivo.
¿Qué de ese México -insisto- quisiera pasear el señor Calderón?
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