Epicentro de Leonardo Schwebel

Impunes y sobre todo cínicos, Vizcarra y Sigala, en algún lugar del mundo, siguen gobernando lo que queda de Tonalá ante la complacencia y complicidad de los dirigentes panistas y del propio gobierno de Jalisco. Si de por sí ya sería de un sitio decente investigar qué pasa con ciento veinte y pico millones de pesos misteriosamente perdidos (escuche el reporte de Víctor Chávez en podcast de MEDIOS UDG NOTICIAS, desde el epicentro de la información, con Leonardo Schwebel de este miércoles 27 de febrero de 2008 o escúchelo en este blog con esa fecha) hay que considerar las líneas genealógicas que dieron paso a lo que Javier Hurtado (también escúchelo podcast) calificó justamente de pinochetonaltazo.

Quien promovió e instigó el asunto del propio PAN para destituir a un panista (¡Válgame Dios!) es José Isaías Basulto Lemus.

Este personaje es nada menos que el suplente oficial de Jorge Vizcarra. De su propia planilla. Y note lo que reportó en Mural, Vania de Dios: "...estuvo cobrando como policía en Ahualulco de Mercado mientras trabajaba en la casa de campaña del panista. Durante el último cuatrimestre del 2006 Basulto Lemus fue el encargado de la agenda diaria de Vizcarra Mayorga y era la persona a través de la cual se tramitaban las entrevistas con el entonces Alcalde electo (Vizcarra)".

Basulto, al tomar protesta como sustituto de Vizcarra en el Ayuntamiento, votó por el nuevo presidente sustituto (el "quitado" González del Toro). Y fíjese: "Basulto Lemus es uno de los tres empleados que se beneficiaron el último cuatrimestre del 2006 como policías de línea en la nómina de Ahualulco de Mercado, cuyo Presidente Municipal era Guillermo Medrano Barba".

Y para más datos:

Nombre
Cargo en el 2006
Cargo en el 2007
Guillermo Medrano Barba
Alcalde de Ahualulco de Mercado.
Dir. Gral. de Infraestructura en Tonalá.
José Isaías Basulto Lemus
Policía en Ahualulco de Mercado. Encargado de la agenda diaria de Vizcarra y quien tramitaba las entrevistas.
Director de proveeduría o recursos materiales en Tonalá. Regidor suplente en caso de que salga Vizcarra Mayorga.
José Macario Díaz Moreno
Encargado de casa de campaña del Alcalde electo. Policía en Ahualulco de Mercado.
Asistente en la dirección de comunicación social, asignado a la oficina de Jorge Vizcarra Mayorga.
Oswaldo Alfredo Armenta López
Escolta del Alcalde electo Jorge Vizcarra Mayorga. Policía de Ahualulco de Mercado.
Comandante segundo en la Policía de Tonalá, asignado como escolta de los hijos del Alcalde de Tonalá

Con esto se confirma una liga de poder que ha recibido el apoyo de las grandes autoridades de Jalisco, incluyendo al Procurador Tomás Coronado, quien dejo ir a Vizcarra y Sigala.

Hoy sabemos que en algún lugar de Florida, Vizcarra manda en Tonalá, pero el verdadero mandamás de ese pobre municipio tiene de apellido Valencia.

Sobre este tema, reproduzco el texto de mi compañero de Más que Noticias, el reportero Rodolfo Chávez calderón:

¿Los Valencia en Tonalá?
Rodolfo Chávez Calderón. EL OCCIDENTAL
Guadalajara, Jalisco OEM.- Un ultimátum, quién sabe de qué y quién sabe de dónde, pero se dio a los Valencia, una familia de narcotraficantes que se han apoderado de Tonalá, donde prácticamente se les reconoce como los dueños, para que dejen la localidad, ante la posibilidad de que el Ejército Mexicano realice operativos en la zona.Y no es cosa de ahora, sino de mucho tiempo, de años, que estos señores se han posesionado de la población, para prácticamente ordenar y determinar lo que se hace y lo que no en ese lugar.Recordemos el estallido de granadas en el palenque, cuando el presidente municipal era Palemón García Real, cuando el director de la Policía era Javier López Ruelas, y que se puso en claro que dentro del palenque había policías municipales encargados de custodiar, pero que nunca se preocuparon porque dentro del sitio en cuestión hubiera gente fuertemente armada, puesto que tras de los estallidos salieron a relucir armas de grueso, muy grueso calibre.Y entonces se pretendía matar precisamente a uno de los regenteadotes del palenque, que era miembro de la familia Valencia, al que por cierto cuidaban agentes de la Policía Judicial del Estado.Con esto quiero decir no sólo que el narco no acaba de llegar a Tonalá, sino que estaba por ahí desde hace tiempo, que se asentó bajo las barbas de la administración municipal, haya sido panista o priísta desde hace muchos años y que lo lamentable, lo grave, es que esa otrora tranquila villa alfarera se haya convertido en un nido de pistoleros solapados por la policía.Miguel Magaña, por ejemplo, se sabe que durante su administración, que fue muy breve, tuvo que pactar con los Valencia, ofrecerles protección de sus policías mediante el disimulo, para que pudieran circular con armas de fuego por todo el municipio, a cambio de -cuando menos- que ellos se encargaran de impedir que por parte de su gente hubiera hechos violentos que pudieran poner a Tonalá otra vez en la palestra internacional, como ocurrió cuando las granadas.Analizando todo esto podemos entender cómo es que Palemón fue detenido en la carretera a Tonalá cuando era alcalde, al pasar por un retén de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. El escándalo que armó sirvió para que se retirara la Policía Estatal de las carreteras. Antes de eso, siendo director de la Policía Municipal Héctor Córdoba Bermúdez nunca dejó de establecer retenes en las carreteras y en el Periférico en torno a Tonalá. Estos servían para impedir que gente armada entrara al municipio, pero nunca detuvieron a los Valencia, seguramente no los vieron circulando tranquilamente por las calles tonaltecas en sus vehículos blindados y fuertemente armados.En fin, el caso es que los señores están, estuvieron y aunque decimos que la autoridad casi se atreve a echarlos fuera, difícilmente podrá hacerlo, al menos que haya un acuerdo para que se retiren pacíficamente sin hacer la guerra, pero ¿a dónde irán?Y ¿quién será el bueno, el animado, el atrevido, el osado que investigue cuántos y de a cómo son los judiciales que han custodiado a miembros y a pistoleros de esta familia? Desde luego, que siendo Tonalá tan pequeño, para vivir ahí necesitan tener controlado no sólo al Gobierno municipal, sino también a la Policía, puesto que en ello les va la vida.