jueves, septiembre 18, 2008

Encrucijada

Epicentro de Leonardo Schwebel

El pasado lunes 15 de septiembre, La gaceta (cuya edición sigue a cargo de la Dirección de Información de la DGM de la UdeG) http://www.medios.udg.mx/gaceta/nota.php?subactual='&&id=6 prsentó una nota del reportero José Díaz Betancourt, donde entrevista al experto en temas de seguridad, Guillermo Zepeda Lecuona, del ITESO. La nota, titulada Con V de Violencia, está en nuestro Primer Plano y portada con el título de Inseguridad todos pierden.
En ella, Lecuona dice: “Nos estamos acostumbrando y nuestro umbral de tolerancia está subiendo y es increíble que el día en que sólo hay cinco ejecutados en el país, sea un día pacífico, cuando hay días de 20 y 25 ejecutados. No debemos acostumbrarnos a eso”
El texto remarca:
Sólo cinco por ciento de los delincuentes nos trae de cabeza
De acuerdo a un estudio reciente, los delitos que más contribuyen a la percepción de la inseguridad en México, son los siguientes: homicidio intencional, secuestro, violación, tráfico, comercio y transporte de drogas, tráfico de armas, tráfico de personas, lavado de dinero, robo de vehículo, piratería, contrabando, robo violento a persona, robo a casa habitación, robo a camión de carga, negocio, persona y banco.
Encuestas del Instituto Ciudadano de Estudios sobre la Inseguridad (ICESI), levantaron estos resultados, que fueron procesados por el Centro de Estudios para el Desarrollo, Asociación Civil (CIDAC) y una de las conclusiones más contundentes es que el 5 por ciento de los delincuentes de una sociedad determinada, comete entre el 65 y el 70 por ciento de los delitos más graves del listado anterior
.

Y nada más para seguir acotando, el reportero apunta y el experto señala:
Explica que pesar de los discursos políticos que datan de hace 15 años, tiempo en el que se presume se ha recrudecido la inseguridad en México, el saneamiento de las corporaciones y la honestidad de los policías están pendientes y que la desconfianza recíproca entre las políticas públicas y los erráticos comportamientos de los mandos “han permitido que la inercia y los intereses delictivos aniden y se fortalezcan en el seno de las instituciones que deberían combatir el crimen. El camino que enmiende este oscuro panorama comienza por el saneamiento de las corporaciones, el compromiso de la clase política con políticas integrales y sostenidas, la protección de víctimas y agentes de la autoridad y el combate a la impunidad, que tiene un índice apabullante: 98 por ciento”.
Por último, la tesis insiste en que el crimen organizado tiene tres anclajes que deben combatirse: “Capacidad de operación sofisticada en ámbitos cada vez más extensos y complejos de actividades delictivas; capacidad financiera que les permite operar, equiparse y corromper a autoridades; y algún grado de contubernio y penetración entre agentes de la autoridad. En estos tres frentes debe darse una lucha consistente y estratégica”.

Aunque ha sucedido en otras ocasiones, esta vez La Gaceta estuvo más que oportuna.
Sobre lo mismo, reproduzco el comentario que hay en este Blog de nuestro amigo radioescucha Ignacio:
Sr:
Yo fui a dar el grito con mis tres hijos aqui en gdl, me muero de rabia y miedo pensar que pudimos ser los muertos de morelia, ya basta de corrupcion en el gobierno. Basta de falsas guerras.


Ayer también, frente a un grupo de chavos estudiantes de la UdeG tratábamos de desmenuzar varios subtemas: Esto que vivimos en Morelia es Terrorismo? Es un ajuste de cuentas? Es un aviso? Es ya el primer Nunca...Nunca habíamos pasado eso, como lo señaló en su columna de ayer Sergio Sarmiento?
Como País parece que hemos llegado a la edad de los "nuncas". Esto nunca había pasado en nuestro México, nos decimos constantemente, pero ahora está ocurriendo http://www.mural.com/editoriales/nacional/446/890831/default.shtm

Yo defendí con ciertas argumentaciones que lo de Morelia no era un acto terrorista y que tampoco era una acción del Narco, como lo señalé en este Blog. Sin embargo eso es hablar de técnica en la ciencia política. Lo que también defendí ayer mismo, es que ese acto vandálico, por ponerle un título, sí era capaz de sembrar terror...terror social.

El mismo Sarmiento lo avala en su columna de hoy:
Lo que sí sabemos es que un ataque en una plaza pública atestada de gente común y corriente es una forma de infundir terror en la población. En eso, los perpetradores están recurriendo a la vieja táctica que han utilizado los terroristas desde los tiempos en que Robespierre sembró el terror entre los franceses desde el Comité de Salud Pública de la Revolución Francesa. Por eso bien podemos decir que lo que estamos viendo son actos de terror perpetrados por terroristas... aun cuando a algunos no les guste pronunciar estas palabras http://www.mural.com/editoriales/nacional/446/891188/

Pero a reserva de los modos o los sustantivos y más aún, los adjetivos, estamos frente a una encrucijada. En este mismo Blog señalábamos lo que un aparente comunicado de la llamada Familia, reprodujo en panfletos y mensajes por celular:
"La Familia Michoacana' repudia el acto terrorista perpetrado por parte del grupo delictivo denominado 'Los Zetas', donde no discriminaron y atentaron en contra de niños, mujeres y ancianos que son ajenos a cualquier conflicto. Queda claro que esa no es nuestra manera de actuar, por eso pedimos que reenvíen (este mensaje)".

A un gobierno en crisis como el nuestro, este tipo de acciones violentas no lo mueven, al contrario, lo refuerzan. Es más, le conviene. Países donde la lucha armada es un recurrente económico, caso Estados Unidos, un Al Qaeda le funciona en esos términos. Enaltece el nacionalismo, justifica el autoritarismo y le da aval para acciones de persecución. Y eso se comprobó hoy con la iniciativa que presenta el Presidente Calderón:
El gobierno federal propondrá al Congreso de la Unión la creación de un fideicomiso público, único y exclusivo para el apoyo a víctimas de la delincuencia organizada.Este fideicomiso se integrará con los bienes que se decomisen a la industria del narcotráfico, secuestro, tráfico de armas y trata de personas. Esta propuesta contenida en el proyecto de Ley de Extinción de Dominio, pretende ubicar propiedades -en la mayoría de los casos- y después de investigar si fueron o son propiedad de delincuentes, decomisarlos para incorporarlos a un fideicomiso público de apoyo a víctimas http://www.eluniversal.com.mx/notas/539466.html

Muchos hoy estarían de acuerdo en aplicar Pena de Muerte a quién haya perpretado ese acto, sin precedente en nuestro país. Siete muertos y 130 heridos, todos civiles, suena demasiado atractivo para castigar con mano dura.

Pero volvemos al origen. El terror social ya está sembrado y como en España o Colombia, vamos ir con temor a tomarnos un café esperanzados en que no nos toque un granadazo o coche bomba o un ajuste de cuentas sin ton ni son.
Sembrado el terror social, que llamemos o no terrorismo a lo sucedido en Morelia, ya es lo de menos.
Con nuestra corta memoria mediática, ya pasaron a segundo término los enlaces entre la PGR-AFI con los secuestradores de Martí o las componendas de Vizcarra con crimen organizado o los granadazos en Tonalá (Trónala) o la SSP.
Y mientras esto tiene un color, el gobierno federal, incapaz de darle seguridad a sus habitantes, se engolosina en discursos y apelativos. Las fotos de hoy con Calderón y su esposa junto a la cama de los heridos en Morelia, son un insulto a la inteligencia.





1 comentario:

Anónimo dijo...

El video de TVE española aqui:
http://www.rtve.es/mediateca/videos/20080919/sur-norte-fiesta-nacional-mexico/292117.shtml?s1=noticias&s2=&s3=