El lado oscuro de El Vaticano

Epicentro Informativo de Leonardo Schwebel

La política de El Vaticano ha iniciado una ofensiva durante el 2009 que pone en el Epicentro las verdaderas intenciones del Papa Benedicto XVI.
El periodo de Juan Pablo II de 26 años estuvo directamente involucrado con los acontecimientos de una época de cambios radicales.
Su influencia fue determinante en asuntos exteriores tanto en Europa como en América Latina, además que participó directamente con la transformación de la relación de México con el Estado Vaticano y la propia Iglesia Católica.
Sin embargo Juan Pablo II siempre se mantuvo muy cerca de los valores conservadores y Ratzinger siempre estuvo atrás de ello.
A casi cuatro años de la muerte de Juan Pablo II y después de mantenerse al margen en muchos asuntos, ahora Benedicto XVI ha empezado a dar muestras de que existe, que está activo y de mantener firmes sus ideales.
Durante el Encuentro Internacional de las Familias, la semana pasada, cayó hondo la declaración que las mujeres son culpables que las violen por su vestuario.
También el Papa mantuvo una postura en el Epicentro del conflicto en la Franja de Gaza.
Ahora la cruzada tiene que ver con el aborto y las declaraciones del presidente estadounidense.
Los términos preocupado y desolado por las decisiones de Obama, marcan una pauta que seguramente va a continuar.
Los casos de pederastia son un tema que Benedicto XVI ha enfrentado como representante de la Santa Sede y por primera vez declaró a favor de las víctimas.
También como Vaticano declaró en torno al narcotráfico en México.
Si bien eso es un avance, muchos temas siguen en el lado oscuro de El Vaticano y no hay muestras de abordarlos, por lo menos con la misma convicción que se defienden otros.
Ahora Benedicto XVI retoma el caso de la Iglesia y el Holocausto, que ha provocado reacciones en su contra.
Las declaraciones del Papa en torno a la unidad refuerzan que durante este 2009 tendrá un papel protagónico.
Aún se extraña la figura de Juan Pablo II y después de mantenerse con perfil bajo, Benedicto XVI ha mostrado que está dispuesto a todo.
Entramos a una nueva etapa donde la Iglesia Católica y su política, estarán en el Epicentro de las noticias.